Israel fue concebido en el propio corazón del Creador y en ese territorio se han dado los mayores milagros de la historia, esto lo ha convertido en el referente por excelencia de la grandeza de la fe.
En esta ocasión, las peticiones serán llevadas al Monte Moriah, lugar donde Abraham mostró obediencia a la Palabra del Señor estando dispuesto a sacrificar a su propio hijo, Isaac, por lo cual Dios juró hacerlo padre del linaje guiado por la sumisión a Él, nacido no sólo de carne, sino del Espíritu. También en tierra de Moriah el Señor Jesucristo dio su vida en sacrificio para confirmar dicho pacto a favor nuestro.
Hasta el día 13 de diciembre, en cada Centro de Ayuda Espiritual, se estará hablando del poder de la Palabra. Asista y conozca cómo una palabra puede transformar su vida. ¡Le esperamos!